Orquídea, la Flor del Amor y la Fertilidad
Las flores son una de las mejores maneras de expresarnos, nuestros sentimientos, mientras también atraen nuestro sentido visual. Con la ayuda de una flor, podemos decirle a alguien que lo amamos; podemos llevar buenas vibras a un lugar o decorar nuestros hogares y oficinas, por eso a veces subestimamos las flores. Este artículo contiene la historia de la hermosa orquídea, sus orígenes y sus significados. Puedes aprender:
* Etimología de las orquídeas
* El significado de los colores de las orquídeas
Etimología de las Orquídeas
El nombre “orquídea” proviene del griego “orkhis,” que simboliza la fertilidad; por eso las orquídeas son los símbolos universales del amor. Hay más de 2000 especies de orquídeas, pero la más popular, la orquídea mariposa, fue descubierta por ser confundida con una polilla por el naturalista sueco Osbeck Peter.
Significado y Símbolos
Debido a su nombre, las orquídeas siempre han estado asociadas con la fertilidad, el amor y la pasión. Por su aspecto exótico, le dan a cualquier lugar un sentimiento romántico.
Una de las más populares es el paphiopedilum, que proviene de ‘Paphos,’ el templo griego donde se adoraba a Afrodita, la diosa del amor. Los antiguos griegos comían los tubérculos de orquídea, creyendo que de esta manera podían elegir el género de su hijo. Por ejemplo, cuando la madre ingería tubérculos delgados, el futuro hijo sería una niña, mientras que los tubérculos gruesos consumidos por el padre significaban que tendrían un niño.
Aunque tienen un aspecto salvaje y exótico, las orquídeas siempre han estado relacionadas con la realeza y la nobleza; requieren ser ofrecidas con atención y amor especiales. Simbolizan nuestro deseo de alcanzar la grandeza o desarrollar intimidad. Sus pétalos perfectos hablan por sí mismos y muestran la perfección de la naturaleza.
Las orquídeas son un símbolo de amor, y eso también puede traducirse como un recordatorio de amor propio. Ese amor propio nos hace únicos, especiales, bellos y nos permite soñar con nuestras metas porque emiten amor propio a través de su belleza.
En la era victoriana, las orquídeas eran muy raras y se encontraban solo en los trópicos. Por eso, los victorianos las veían como un signo de lujo y las ofrecían solo a personas muy especiales.
Los aztecas mezclaban la orquídea de vainilla con chocolate y creían que este alimento haría a sus guerreros más poderosos y exitosos en sus batallas.
Los chinos creen que las orquídeas ofrecen hijos saludables; por eso siempre han utilizado aceites esenciales de orquídea para aumentar la fertilidad y ofrecían orquídeas a futuros padres. Ellas muestran poder, y por eso en Japón, la gente las asocia con abundancia y lujo. Las ponen en todas partes porque la fertilidad debe estar presente en todos los aspectos de la vida, incluso en los negocios. En China, la orquídea también se ha utilizado como medicina alternativa para problemas de tos, riñón, estómago, pulmón y ojos.
Las orquídeas son también bien conocidas por su sutil pero hermosa fragancia, por eso muchas personas eligen comprar perfumes de orquídea. El conocido extracto de vainilla, que usamos en productos horneados y dulces, se elabora en realidad a partir de la planta de orquídea de vainilla.
El Significado de los Colores de las Orquídeas
Cuando se trata de colores, debemos ser cuidadosos al ofrecer orquídeas, ya que sus colores pueden dar a las flores diferentes significados.
Una orquídea roja simboliza pasión, amor y emociones fuertes. Es el regalo ideal para tu pareja, pero no para tu madre o hermana. Ayuda a expresar tus fuertes sentimientos de amor y hace que la mujer se sienta amada y valorada. Enfatiza la pasión y el fuego.
Una orquídea azul es un signo de singularidad y belleza. No está necesariamente relacionada con sentimientos amorosos, por lo que podría ser un excelente regalo para alguien que admiras. El color azul también se asocia con la sinceridad y la espiritualidad, así que puedes ofrecérsela a alguien que consideres singularmente bello.
Una orquídea rosa simboliza feminidad, romance y dulzura. Pueden ser una oferta para tu enamorado o pareja, pero no enviarán un mensaje romántico equivocado a alguien, ya que simplemente pueden significar que te gusta y respetas a la persona.
Una orquídea blanca simboliza pureza, inocencia, belleza y fe. Puedes ofrecer una orquídea blanca a cualquier persona que respetes, incluso a un amigo especial. También puede ser un excelente regalo para tu pareja, lo que significa que valoras su pureza. Es ideal para el diseño floral de una novia, que podría ofrecerle una vibra salvaje, pero pura e inocente.
Las orquídeas moradas son únicas y poderosas. Simbolizan realeza, lujo y riqueza. Pueden ser ofrecidas a cualquiera, ya que no son necesariamente románticas, y hacen que comprendan que los consideras especiales, únicos y que los respetas.
Una orquídea amarilla simboliza felicidad, alegría y buena energía. Pueden ser ofrecidas a cualquiera, ya que levantan el ánimo de cualquiera. También son la elección adecuada para tu dormitorio o sala de estar, ya que traen una vibra positiva y buena a tu hogar.
Una orquídea naranja es una buena idea para tu oficina, ya que simboliza creatividad y éxito y siempre puede recordarte que puedes hacer cualquier cosa que desees. También simboliza entusiasmo, lo que siempre te trae un estado de ánimo positivo.
Una orquídea verde no es tan común y simboliza frescura, limpieza y seguridad. Son perfectas para tu oficina o hogar, pero también pueden ser regaladas a cualquiera, ya que son un signo de amistad y admiración.
Las orquídeas siempre han sido una de las mejores opciones cuando se trata de flores. Aportan una buena vibra a cualquier habitación; le dan a tu sala de estar una sensación de lujo; pueden recordarte que siempre debes ser tu verdadero yo por su apariencia única. Siempre debemos ser únicos y especiales, al igual que una orquídea. También pueden recordarnos nuestra propia belleza.
Las orquídeas están aquí para hacernos recordar que la energía que damos es la energía que recibimos, por eso siempre debemos ser sinceros, honestos y positivos, para recibir lo mismo a cambio.
