

¿Recuerdas esos pequeños collares de pasta seca que solías hacer para mamá? ¿Qué tal las flores que recogías del jardín y ponías en el tarro de yogur vacío? Bueno, me temo que ahora, como adulto, se espera que lo hagas mucho mejor. ¡Nada de zapatillas de última hora o flores del supermercado, es hora de dejar volar tu imaginación!
Entonces, ¿por qué no la sientas y le sirves un buen vaso de algo frío y la sorprendes con algo especial? Tu regalo no tiene que ser un gran gesto exagerado o un ratón de computadora de 24 quilates adornado con cristales. No, algo que tenga un poco de pensamiento será suficiente.
La joyería es un regalo bastante estándar para tu madre, pero ¿por qué no elevar tu juego este año y comprarle algo que venga en esa famosa caja azul de Tiffany? ¡Esto seguro que la sorprenderá! Otra idea de regalo es una sesión de spa, para que ambos puedan pasar un tiempo de calidad juntos.
Si no tienes el presupuesto para esto, manténlo simple y hazlo tú mismo. Ya sea un collage enmarcado de algunas de sus imágenes favoritas de tu infancia y un ramo personalizado de sus flores favoritas, estos son todos los pequeños detalles que la sorprenderán y mostrarán lo considerado que eres.
Y, por supuesto, ¡prepárale la cena! Pero asegúrate de cocinar un plato que domines para que no tenga que poner un pie en la cocina para ayudar.
Para complementar su regalo, regálale tiempo de calidad contigo. Y no olvides la guinda del pastel: una tarjeta con un mensaje sincero, seguro que la hará sentir amada y apreciada en su día especial. ¡No olvides recordar el Día de la Madre!
Fuente de la foto: http://goo.gl/Ox8qww